Por norma general, ya seas un loco del diving en la Costa Brava o no, quién ha probado el bautismo de buceo suele estar muy contento y, el primer contacto con el fondo marino, lo catalogan como una experiencia única.

En el momento del bautismo en la Costa Brava se suele bajar alrededor de 12 metros, dependiendo del estado físico de la persona, su edad o de su seguridad a la hora de practicar el diving.

Dos formas de realizar el bautismo: Mar y piscina

Es una duda muy común. La piscina es un entorno controlado con una profundidad muy baja y que ofrece un plus de seguridad en el que, en cualquier momento, te puedes poner de pie sacando la cabeza fuera pero, por contra, no tendrá la misma experiencia en cuanto a explorar la flora y fauna marina.

Por norma general se suelen hacer en el mar, en un lugar seguro 100% donde poder disfrutar de la experiencia a la vez que se explora el lecho marino. De esta forma, evitas pagar 2 veces la misma actividad si lo haces inicialmente en piscina y, al ver que te gusta, quieres disfrutar del mar.

¿Cómo funciona un bautismo en la Costa Brava?

Normalmente se suele hacer una pequeña parte teórica para tratar temas como el traje, señales básicas y aspectos de seguridad. En ese momento ya podremos colocarnos el traje y subirnos al barco donde estarán nuestras botellas y chaquetas completamente preparadas por alguien del staff.

Cuando se llegue a la zona de bautismo de la Costa Brava, se hará un último repaso de lo comentado anteriormente y se procederá a equipar a todos los participantes con los chalecos, plomos, aletas, máscara y comprobar que todo está en perfecto estado para el momento del diving. Se hará alguna prueba con el regulador en el agua, respiraremos con la cabeza sumergida para estar tranquilos con la sensación de poder respirar bajo el agua.

¡Llegados a ese punto, solo queda disfrutar de la experiencia de la forma más segura posible!